Los primeros resultados del proyecto de cooperación ‘Olivos de Aragón’ han evidenciado la existencia de hasta 30 nuevas variedades de olivar en territorio aragonés, ubicadas principalmente en la zona este de la comunidad autónoma. El proyecto comenzó en 2020 con el objetivo de conocer las variedades autóctonas, preservarlas y catalogarlas mediante análisis genético -a través de marcadores de ADN y caracterización morfológica-, y concluirá en septiembre.
Los socios de esta iniciativa- el grupo LEADER Bajo Aragón Matarraña (OMEZYMA), el grupo LEADER del Campo de Belchite (ADECOBEL), Viveros Mariano Soria, Aceites Lis y Fruticultores de Caspe (AFRUCCAS)- se reunieron este jueves 4 de julio en Alcañiz para conocer los resultados presentados y realizados por la investigadora del Centro de Investigación y Tecnologías Agroalimentarias de Aragón (CITA), María José Rubio-Cabetas.
Con la colaboración de la Red de Semillas de Aragón, a lo largo de la duración del proyecto se han geolocalizado 96 variedades. Una vez comparados estos datos con los del Banco mundial de olivos del IFAPA de Córdoba (1.200 variedades de 29 países), se ha determinado la existencia de 30 genotipos nuevos, es decir, que no coinciden con las variedades catalogadas hasta ahora.
Aunque inicialmente son muy relevantes, se trata de unos resultados que hay que completar catalogando los árboles y analizando sus frutos. “Todavía queda trabajo, pero estamos muy satisfechos con estos primeros resultados”, ha explicado el coordinador del proyecto, Joaquín Lorenzo (OMEZYMA).
Los socios también visitaron la finca experimental que el CTA del Gobierno de Aragón tiene en Alcañiz para decidir en qué parcela se ubicará el banco de germoplasma de olivos nuevos de Aragón que se seleccionen una vez concluya la investigación.
El proyecto ‘Olivos de Aragón’ se ha financiado con cargo a una subvención en materia de apoyo a acciones de cooperación de agentes del sector agrario (Plan de Desarrollo Rural 2014-2020).